Buenos Aires nos quiso
Donaldo Donado Viloria Buenos Aires es la capital de un país europeo que queda al lado de Italia y muy cerca de Francia y España. Allí llegamos, mi mujer y yo, en el vientre de un avión que aterrizó a las tres y cuarto de la madrugada (1:15, hora de Colombia) del primer sábado de abril de 2006 en el aeropuerto de Ezeiza, nombre que rebosa italianidad, como todo en esa ciudad. El aire era ligeramente frío. Luego de los trámites de inmigración y de retirar el equipaje, salimos en busca de la guía o de la persona que nos iría a recoger al aeropuerto. Cruzamos varias puertas que se abrían solas. Antes de cruzar la última, aparecieron, dispuestos en diagonal, mostradores de empresas de alquiler de autos. Hombres y mujeres jóvenes, desde detrás, nos ofrecieron, sin gritar, pero con decisión, el arriendo de automóviles. Me sorprendió que pese a la hora, todas las compañías, la mayoría extranjeras, estuvieran allí vendiendo, sin descansar. Al cruzar la última puerta, había va...